Cada año nacen aproximadamente 15 millones de bebés prematuros, y esta cifra va en aumento. Con motivo del Día Internacional de Bebé Prematuro, queremos hablaros de la lucha diaria a la que se enfrentan los bebés prematuros y explicaros cuáles son las mejores técnicas para aliviar las desventajas que puedan sufrir.
¿Cuando consideramos a un bebé prematuro?
Normalmente, un embarazo llega a término entre las 37 y las 42 semanas. Cuando hablamos de bebés prematuros, hablamos de aquellos peques que nacen antes de cumplir las 37 semanas de gestación. Por lo general, cuanto más temprano nazca un bebé, el riesgo de que sufra problemas médicos complicados será mayor:
- Parto prematuro moderado o leve: entre las 32-37 semanas de embarazo.
- Parto muy prematuro: entre la semana 28-32 de gestación.
- Parto extremdamente prematuro: menos de 28 semanas de gestación.
Bebés prematuros: factores de riesgo y síntomas más comunes
Un parto prematuro puede producirse por razones diferentes, aunque hay algunos factores comunes que los pueden provocar; como las alteraciones en el feto o el embarazo, un parto prematuro en anteriores embarazos, un embarazo múltiple o el estado o problemas de la madre. En cuanto a los signos más evidentes de los bebés prematuros, podemos enumerar los siguientes:
- Cabeza muy grande en comparación con el tamaño pequeño del cuerpo.
- Temperatura corporal baja y apariencia más delgada debido a la falta de grasa corporal.
- Problemas de alimentación causados por dificultades para succionar o tragar.
- Problemas para respirar o respiración fatigada.
Bebés prematuros: los cuidados que necesitan
Además de los cuidados necesarios en el hospital por un equipo especializado, hay cosas que están en nuestra mano y técnicas que podemos poner en práctica en nuestra llegada a casa que ayudarán al bebé a fortalecer y desarrollarse. ¡Te contamos cuáles son!
La importancia de preparar el hogar para su llegada
Para facilitar esta adaptación al nuevo hogar, lo primero que hay que tener en cuenta es que el hogar debe adaptarse a su entorno de las primeras semanas, para evitar poner en riesgo su desarrollo. Además, es importante que se encuentre en un ambiente tranquilo, de luz tenue y lejos de los ruidos, y en cuanto a la temperatura de la habitación, lo más recomendable son unos 22 grados. Si algún día tenéis visitas en casa, es importante tener en cuenta algunas cosas:
- Es mejor evitar las visitas de personas resfriadas o enfermas.
- Los invitados deberán lavarse bien las manos con agua y jabón antes de estar en contacto con el bebé.
- Las visitas, de una en una: evitad concentrar a muchas personas a la vez.
- Evitad los besos, y por supuesto, los gritos y bullicio y que fumen cerca de él.
La prendas de ropa importan
El tejido de las prendas de los bebés es siempre un punto a tener muy en cuenta, especialmente cuando se trata de bebés prematuros. Por ello, lo más recomendable es que utilicéis tejidos naturales y fibras suaves, y para ello, nada mejor que el algodón orgánico.
Además, también es importante que las prendas sean más bien holgadas y sean fáciles de poner y quitar: lo mejor son los lazos, ya que las cintas de velcro podrían irritar su piel. También son recomendables los gorritos en los días de frío para mantener el calor, aunque no debemos abrigarlos en exceso. Si estáis buscando la prenda perfecta que reúna todas estas características, ya la habéis encontrado: ¡el pijama anudado es, sin duda, la mejor opción!
Lactancia materna
La leche materna es considerado el mejor alimento para los bebés. Por ello, si durante vuestra estancia en el hospital empezaste a amamantarlo y puedes seguir haciéndolo desde casa, ¡no lo dudes! Además de aportarle al bebé todas las vitaminas y nutrientes que necesita, es una forma genial de estar en contacto piel con piel con tu bebé.
Sin embargo, para que la lactancia materna sea lo más favorable posible, es importante tener en cuenta algunas cosas. En primer lugar, es recomendable que estés tranquila y te sientas cómoda. Además, es importante también que te encuentres descansada y adoptes una posición que os resulte cómoda a ambos.
Algunos bebés prematuros necesitan complementos reforzantes de la leche materna, ya que en algunos casos no es suficiente para su crecimiento y desarrollo. Pero no os preocupéis, en caso de que así fuera, será el pediatra el que os indique el tipo y la cantidad que necesita.
Bebés prematuros: el papel del sueño
Es importante cuidar el sueño de los bebés siempre, pero debemos prestarle especial atención si nuestro bebé es prematuro. Normalmente duermen más que los peques nacidos a término, pero se despiertan de forma más seguida, sus etapas de sueño profundo duran menos y las de sueño ligero son más prolongadas. Por ello, además de dormir las horas recomendadas por el pediatra, es súper importante crear un entorno cómodo y un ambiente relajado.
Nuestros nidos imitan el útero materno, por lo que es la mejor opción para que se sientan tranquilos y seguros. ¿Sabías que cuando los bebés prematuros están en la incubadora, les ponen toallas enrolladas simulado el efecto del rulo del nido?
Bebés prematuros: algunas técnicas
Además de tener en cuenta estos aspectos, existen algunas técnicas para ayudar a la estimulación de los bebés prematuros. El equipo de especialistas estudiarán cuál es la más adecuada en cada caso y se encargará de explicar a los padres cómo deben hacerse. ¡Te contamos cuáles son algunas de ellas!
Masaje infantil
El masaje infantil ayuda a mantener el vínculo con los padres, y además, ayuda al peque a aumentar de peso, mejorar la digestión y evitar posibles cólicos. Es importante llevarlo a cabo de una manera suave y progresiva, ya que los bebés son muy sensibles al tacto.
Método canguro
Es ideal antes de empezar el masaje. Debemos colocar al peque encima del pecho de manera que estemos piel con piel con él y a continuación lo tapamos a modo de arrullo. En algunos casos, favorece una mayor producción de leche materna y ayuda a regular tanto la temperatura como el ritmo cardíaco y respiratorio del bebé.
Estimulación temprana
Con la estimulación temprana, tratamos de interactuar con el bebé para reforzar el vínculo afectivo a través de la vista, el tacto y los sonidos. Es importante hacerlo de una manera tranquila, ya que tampoco es bueno sobreestimular al peque.
¿Cómo se desarrollará en un futuro?
Es normal que en estos casos la incertidumbre sea mucho mayor, ya que en estos casos, suelen surgir muchas dudas sobre cómo va a desarrollarse el bebé por su prematuridad. Tras el alta hospitalaria, será el pediatra quien vaya valorando el estado del peque: es difícil saber de antemano si el bebé desarrollará problemas en un futuro, ya que cada bebé evoluciona de una manera diferente.
Por ello, es fundamental intentar mantenerse positivos: gracias a los avances de la tecnología, los progresos y los tratamientos son cada vez mejores. Es un hecho que no todos los bebés prematuros presentan limitaciones o problemas en su desarrollo, ¡hay que confiar en los profesionales!